jueves, diciembre 21, 2006

Primer aniversario

En un abrir y cerrar de ojos, Página10 cumple hoy un año.

Gracias.

Es una palabra hermosa. Plena de contenido. Será porque dar gracias es, quizá, una de las actividades más humanas. En los Estados Unidos hasta le dedican un día especial al año: Thanksgiving, la fiesta nacional y familiar por excelencia, semejante a la que, al terminar la cosecha, organizaban aquellos que vivieron hace siglos en este planeta.

Agradecer a los demás, que tantas veces nos ayudan, incluso cuando nos critican; que tantas veces nos consuelan, incluso cuando nos exigen. Agradecer cuando nos hacen reír y cuando nos acompañan en nuestro duelo. Porque agradecer es respeto y valoración del otro como un "otro yo". Agradecer a los otros y a la vida misma, como lo canta Violeta Parra: "Gracias a la vida, que me ha dado tanto".

Según el técnico, frío y cuestionado diccionario de la RAE, gracias es una frase usada para "expresar nuestro agradecimiento por cualquier beneficio, favor o atención que se nos dispensa". La definición se encuentra bajo la palabra "gracia", que tiene muchos muchos significados en castellano, incluido los de "don o favor que se hace sin merecimiento", "concesión gratuita" y "benevolencia y amistad de alguien"; y que también se usa para referirse a la capacidad de hacer reír, como cuando dices "me hizo mucha gracia". Gracia remite al latín "gratia", del cual deriva sin duda "gratis", aquello que se recibe sin dar algo o que se da sin recibir algo a cambio.

Dar gratuitamente algo es también una actividad con muchos significados, casi todos nobles: el altruismo, el agradecimiento, el afecto, el reconocimiento, la generosidad, la caridad, la misericordia y el amor. Sobre todo, es una manera de decir "estuve pensando en vos". Por eso no me extrañó cuando hace mucho escuché que la expresión "thanks" o "thank you" se deriva de "to think", pensar.

Curiosamente, las gracias no se dan gratis, siempre se dan como contraprestación de algo recibido. Sobre todo, de aquello que más valoramos: el apoyo, el consuelo, el consejo, la confianza, la verdad, la sinceridad, la amistad o un regalo. Así, me declaro deudor de mis amigos, y por ello a todos y todas les doy las gracias ("gracias totales", como dijo Ceratti aquella vez). Viene al pelo la canción de Alberto Cortés:

A mis amigos les adeudo la ternura, y las palabras de aliento y el abrazo;
el compartir con todos ellos la factura que nos presenta la vida, paso a paso.
A mis amigos les adeudo la paciencia de tolerarme las espinas más agudas;
los arrebatos de humor, la negligencia, las vanidades, los temores y las dudas.
A mis amigos les adeudo algún enfado que perturbara sin querer nuestra armonía;
sabemos todos que no puede ser pecado el discutir, alguna vez, por tonterías.
Un barco frágil de papel, parece a veces la amistad
Pero jamás puede con él la más violenta tempestad
Porque ese barco de papel tiene aferrado a su timón
por capitán y timonel, un corazón...

Por cierto: regalar y donar se parecen pero no es lo mismo. A mis exalumnos de contratos siempre les decía que el Derecho es muy poco romántico, imaginen que el novio habla con su novia y en lugar de decirle "te invito a cenar", le dijese "te dono una comida". Terrible, ¿no? En realidad, tal invitación, desde el punto de vista del derecho, no es más que eso, una donación. Pero el lenguaje es importante.

Entonces, gracias a todos, por acompañarme en este año. Y por ayudarme a crecer y por aguantar mis arrebatos. Seguiremos juntos, hasta que la vida disponga otra cosa.

Y así, nada más cierto para mí que lo que dijo Gibrán en "El Profeta":

"Vuestro amigo es la contestación a vuestras necesidades. Él es ese campo en el que sembráis con amor y cosecháis con agradecimiento. Y él es vuestra mesa y vuestro hogar. … Pues aún sin palabras, en la amistad, todos los pensamientos, todos los deseos, todas las esperanzas brotan y son compartidas con ese placer que no necesita palabras….Y no permitáis que exista interés alguno en la amistad, a excepción de cuanto signifique profundizar en el espíritu. Y haced que lo mejor de vosotros sea para vuestro amigo. Y en la dulzura de la amistad hallaréis la risa y la participaréis en aquello que es grato. Pues en el rocío de las cosas pequeñas, encuentra el corazón el frescor de su mañana".